La inhalación de gas en cantidades altas durante un tiempo prolongado puede generar una intoxicación o colapsos de oxígeno. Los síntomas que se presentan son las náuseas, cefaleas, mareos, convulsiones o vómitos.

Esto ocurre debido a que el metano que contiene el gas es altamente inflamable y aunque no es venenoso en pequeñas cantidades, sí es un peligro al elevarse, lo cual es un riesgo para la salud.

También tenemos que mencionar al monóxido de carbono, un compuesto sin olor ni sabor, que puede surgir en instalaciones de gas natural mal realizadas y que es muy tóxico. Inhalarlo afecta los pulmones porque daña los alvéolos pulmonares.

Como ves, los riesgos de inhalar gas son bastante grandes, por lo que te recomendamos evitar fugas de gas con una correcta instalación de tu gas LP.

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